Después de un laaaaargo parón he decidido volver a escribir. Han pasado muchas cosas desde que decidí inaugurar este blog, pero sin duda lo más importante permanece impasible: mi pasión por la moda.
A través de este espacio os transmitiré mis experiencias, trataré de acercaros al mundillo "fashion" desde mi propia visión y mostraros lo que hay detrás.
También quiero incluir novedades, no sólo escribir sobre moda sino también sobre exposiciones, actividades, restaurantes...
¡Tengo tantas cosas que contaros!
Para empezar esta re-inauguración voy a mostraros un evento al qua acudí en estos días: el cumple de mi amiga Paula Lindo.Todos los años es una ocasión especial y un despliegue, pero en esta ocasión fué mucho más: celebrábamos su cambio de dos a tres decenas, ¡los felices 30!.
Nuestra tarde entre amigas empezó en Beauty Party Center un centro de belleza muy cuco situado en la calle Gaztembide de Madrid. Nos gusta ir allí ya que el trato de su equipo es exquisito. Decoraron el espacio con cositas especiales para nuestra anfitriona: globos de helio con forma de 30, globos luminosos con led y sobre todo muuuucho rosa.
La primera sorpresa fué un video para la cumpleañera, un detalle por parte del centro que nos encantó.
Acto seguido brindamos por esos treinta y comenzamos los tratamientos.
El menú "beauty" que elegimos este año me encantó: plataforma vibratoria, masajeador de piernas y pies, exfoliación, tratamiento hidratante de cara, peluquería, manicura (en mi caso francesa permanente que me encanta) y masaje con piedras volcánicas calientes. Lo anterior combinado con buena musica, comida, bebidas, cócteles bellaterapia de color rosita y sobre todo amigas, no me digais que no es un planazo, ¿verdad?
También contamos con un photocall super chulo que nos preparó la homenajeada, y una tarta arco iris que estaba de muerte.
Acto seguido vino a recogernos una limusina, como ya es tradicional en nuestros encuentros cumpleañeros. Con ella recorrimos Madrid super cómodas y con copa de champán en mano.
La siguiente parada fué la cenita en Opium, en José Abascal 57; allí cenamos fenomenal (mi tataki de salmón no podía estar más bueno) entre risas, anécdotas y ríos de vino que los camareros nos obsequiaban en cuanto veían una copa medio vacía. Recomendable 100%.
Para rematar la noche nos transladamos a la zona de discoteca donde tomamos algo y bailamos hasta que los pies no nos dejaron mas opción que abandonar.
Os dejo fotitos del día, para que veais todos los detalles de los que os hablaba y cojais ideas para futuros eventos como cumpleaños, despedidas de soltera...
Queda reinaugurado Miss Best dress, ¡un besote!
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